DIA NACIONAL DEL PATRIMONIO 2019 EN EL MUSEO A CIELO ABIERTO EN SAN MIGUEL

Testimonios

Por primera vez se celebró el Día del Patrimonio Cultural en la Villa San Miguel, dentro del marco de existencia y relevancia que tiene para el arte urbano visual el Museo a cielo abierto en San Miguel. La fiesta cultural del Patrimonio fue convocada oficialmente este año a fines del mes de marzo, justamente con ocasión de la inauguración del mural n° 60 “A cielo abierto” de Ecos y demás artistas colaboradores. El lema “Juntos hacemos patrimonio” anunciaba una fuerte valorización de espacios artísticos y culturales intangibles, eso que trascienden el acotado listado de edificios que el Estado y la ciudadanía reconoce como inmuebles significativos o emblemáticos.

Visita guiada, sábado 25 de mayo del 2019, Villa San Miguel.

La jornada del 25 de mayo contó con múltiples actividades en la Villa San Miguel, entre las que se destacan: visitas guiadas al museo a cielo abierto, actividades recreativas y taller de pintura en atril para niños, obra de teatro para la familia –provista por la escuela de Teatro de la Universidad Finis Terrae-, feria local de artesanos, taller de batucada y circo barrial, operativo para trámites municipales, y el taller de mosaicos de la Villa interviniendo el mobiliario reciente de la plaza K8, entre otras. No faltaron, por supuesto, un sitio de completada y otro de choripanes para saciar el apetito, preparados por integrantes de organizaciones sociales del barrio.

La actividad que concitó mayor interés fue la de visita guiada a los 63 imponentes murales que componen la muestra artística en la actualidad. Bajo el lema “Historia de la Villa, el Museo y su transformación”, alrededor de ciento cincuenta personas disfrutaron los recorridos y explicaciones en torno a esta monumental galería de arte callejero, que cumple ya nueve años de existencia y que reúne los trabajos de muralistas y grafiteros, a título individual y colectivo, nacionales y extranjeros, bajo la dirección artística de Mono Gonzalez y la gestión del Centro Cultural Mixart, liderado por el poblador Roberto Hernández.

La semilla quedó sembrada. Será difícil para los habitantes de la Villa San Miguel no volver a sumarse en el futuro a esta celebración nacional del Patrimonio Cultural.

Visitas guiadas, sábado 25 de mayo del 2019, Villa San Miguel. Mural n° 10, Nuestra Feria.
Detalles. Decorando entorno inmediato para que se transforme en pie de muro. Mural n° 60, Ecos, 2019.

 

Actividad de organización juvenil La Minga, sábado 25 de mayo del 2019.

 

Participantes del Taller de Mosaico, 25 de mayo del 2019.

 

Muralista chilena La Loica, terminando la última obra que se añade a la colección del Museo a cielo abierto en San Miguel: Biofilia Humanimal. Sábado 25 de mayo del 2019.

 

 

 

Teatro para niñas/os y adultas/os por la Escuela de teatro de la Universidad Finis Terrae. Sábado 25 de Mayo del 2019.

 

 

Museo a Cielo Abierto en la Villa San Miguel: celebración del día del Patrimonio Cultural – Chile 2021

La Loica, destacada muralista chilena, artista colaboradora del Museo a Cielo Abierto en San Miguel

La Corporación Cultural de la Ilustre Municipalidad de San Miguel, comuna que aloja a la villa y el museo a cielo abierto del mismo nombre, nos invita -mediante un emotivo video- a rememorar algunas de las actividades más espectaculares surgidas al alero del arte urbano a través de los once años de historia que ya tiene este proyecto.

¡Qué lo disfruten!

«Cómo el arte salvó a una población entera de perderse en el abandono»

Escrito por: Marco Fajardo.

Publicado en El Mostrador.

Cincuenta años después de su fundación, un barrio periférico era presa del abandono y el acoso de las inmobiliarias. La creación de enormes murales que ya gozan fama mundial no sólo salvó el lugar, sino que contra lo que sucedía antes enorgulleció a los vecinos de vivir allí, gracias al arte de más de 70 artistas de Chile y el mundo.

Cincuenta años después de su fundación, un barrio periférico era presa del abandono y el acoso de las inmobiliarias. La creación de enormes murales que ya gozan fama mundial no sólo salvó el lugar, sino que contra lo que sucedía antes enorgulleció a los vecinos de vivir allí, gracias al arte de más de 70 artistas de Chile y el mundo.

A fines de 2009, la población San Miguel de la comuna homónima del sur de Santiago –un conjunto de casas y edificios de departamentos que datan de 1960- estaba hundida en el abandono.

El espacio público –las plazas, las veredas- quedaron a merced de los chicos con consumo problemático de drogas. La gente dejó de pintar sus casas. Y las inmobiliarias miraron con cada vez más apetito el lugar, situado cerca del metro Departamental y al lado de la Panamericana, un barrio de seis mil personas que con la construcción de nuevos edificios por medio podían vivir hasta treinta mil.

Fue en ese ambiente, en 2009, que un grupo de vecinos se reunió a conversar el tema. Y después de un buen tiempo quejándose y esperando una ayuda del municipio o el gobierno que nunca llegó, decidió tomar el destino en sus manos.

Y de la mano del arte –el graffiti, el muralismo- lograron literalmente salvar el barrio, nada menos que con la creación del Museo a Cielo Abierto San Miguel, materializado en más de una treintena de murales en sus edificios, muros y kioskos con obras de artistas de Chile y el mundo, que hoy son admirados por visitantes de todos los orígenes.

Hubo obstáculos, claro: la ausencia de organizaciones barriales, primero; la desconfianza de los vecinos ante la iniciativa, luego (muchos rechazaban el muralismo por político), y más adelante los escollos propios de poner en práctica una iniciativa, con desavenencias como las que hubo con la ONG Nodo, uno de los socios iniciales.

Pero resultó. Allí está. Antes la gente evitaba decir que era de la población San Miguel, porque decían que allí se vendía droga. Hoy los vecinos lo dicen con orgullo: “Sí, somos de la población de los murales”. Lo cuenta Roberto Hernández, nacido y criado acá, y uno de los gestores de la iniciativa.

“Un lunar”

“Un lunar”: eso era antes la población San Miguel, un barrio humilde en medio de la “Nueva Providencia” que intentó crear la Concertación en los alrededores del metro El Llano, llenando de modernos edificios la comuna.

El barrio nació en 1960, como obra del Servicio de Seguro Social. Allí se instalaron en gran medida trabajadores de Madeco y Mademsa, cuando de Departamental al sur solo había potreros.

Hernández cuenta que la vida comunitaria fue especialmente fuerte hasta la época de la UP, cuando la polarización política también se instaló en el lugar. Tras el Golpe militar, solo se mantuvieron los centros de madres (CEMA) como organizaciones barriales, y algunos clubes deportivos como el Tristán Matta.

La democracia llegó sin pena ni gloria, muchos habitantes se fueron y llegaron nuevos arrendatarios, sin mayor conexión con la historia de la población. Muchos de los fundadores del lugar fallecieron. Eran los años 90. Como en todo Chile, la desidia, el desinterés, la apatía, también se instalaron allí.

Hasta marzo de 2009. Fue entonces cuando Hernández y David Villarroel (su concuñado), junto a un grupo de vecinos, emprendieron un proyecto que en pocos meses cumplirá cinco años. Había que rescatar el barrio. “No podíamos seguir esperando”, recuerda Hernández.”Ya habíamos esperando cincuenta años y lo único que pasó fue que la población estaba cada día más fea y más pobre”.

El punto de partida fueron los muros de los edificios que daban a Departamental, que se habían convertido en lugar de rayados y afiches que se superponían unos sobre otros sin control en una atroz contaminación visual.

Primero quisieron hacer un mural con amigos de Villarroel, un ex brigadista, previa consulta a los vecinos. Después imaginaron uno más grande. Luego se entusiasmaron con llenar las paredes de edificios completos. El proyecto ya estaba en marcha.

Una herramienta

“El arte callejero se convirtió en la herramienta principal, la más creativa y la más eficiente para poder dar la lucha y poder reactivar nuestra población que se estaba muriendo”, dice Hernández. “Queríamos buscar una inmunidad, una burbuja que por un lado nos diera una sobrevida y llamara la atención mediáticamente, pero que también nos permitiera generar lazos” o lograr debatir temas como el impacto del Golpe militar y la dictadura en el barrio, algo que nunca se ha hecho.

“El tema del mural se convirtió en nuestro aliado, en nuestro mejor amigo. Las alianzas, los cariños, las lealtades que se han ido generando” con la visita de cada artista “nos han ido dando una estructura cultural de contactos cada vez mayor”, agrega.

Entre medio hubo que constituir un centro cultural (Mixart) con personalidad jurídica para postular a fondos, que luego se obtuvieron de manera épica en 2010: postularon a última hora, sin que nadie los conociera, y ganaron. “Sin el Consejo de la Cultura y el Fondart no hubiéramos podido hacer nada”, resalta.

Partieron con diez murales gigantes, en los blocks que dan hacia Departamental, como una “vitrina” para poder vender la idea y recolectar fondos, según Hernández. Ya llevan más de treinta, ahora muchos de ellos ubicados en el interior de la población, “donde fluye nuestra sangre”, según agrega. Murales que, entre otros, han logrado que vecinos que no habían pintado su muro en cincuenta años ahora lo hagan, sin que nadie se lo pida, en un verdadero efecto “bola de nieve”.

Fotografía de archivo personal

Encuentro generacional

“La experiencia del Museo es interesante porque hemos unidos el muralismo con el graffiti, que antes estaban separados”, destaca el renombrado muralista Alejandro “Mono” González, curador y director de arte de la entidad, en referencia al origen “comunista o rojo” del primero y “yanqui” del segundo.

Para González, el Museo ha servido así como puente generacional entre artistas como él, miembro fundador de la Brigada Ramona Parra, y los más nuevos como Salazart, un graffitero vecino del barrio y autor del primer mural, que retrata a Los Prisioneros, la emblemática banda de San Miguel.

Asimismo, el graffiti, que antes llegaba desde afuera, ahora hace el camino inverso: muchos artistas chilenos están saliendo al exterior para crear en otros países latinoamericanos o de Europa, según cuenta González.

El impacto no se queda allí. González cuenta que hay conversaciones con el Metro para realizar un mural en la estación de Departamental (están en busca de financiamiento), de forma que para los visitantes la entrada al Museo esté allí mismo, como inicio de un fantástico “circuito turístico y cultural”. “El valor agregado acá es cómo se ha revalorizado la población”, dice.

“Nunca pensamos hasta dónde íbamos a llegar”, comenta Patricio Albornoz, otro de los que estuvo en el proyecto desde el principio, y que destaca el valor que alcanzó el contacto con los vecinos y sus opiniones en los bocetos. “Eso hizo que se empoderaran más del espacio. Ahora la gente quiere que le pinten más”.

Otra cosa importante que destaca es que el Museo funciona ahora como verdadera galería de los muralistas y graffiteros de Chile, “muchos de los cuales ya levan más de veinte años pintando en la calle”. Además se ha convertido en un referente positivo tal que su ejemplo comienza a ser replicado en otros lugares de Santiago, como en el Museo a Cielo Abierto en La Pincoya y otro proyecto en San Bernardo.

En San Miguel, la intervención en más de 3.500 metros cuadrados de más de 70 artistas –no solo artistas nacionales, sino también de países como Brasil, Argentina, Colombia, Francia y Bélgica, entre otros- no solo dio origen a un centro cultural, sino también a un sitio web, un calendario, dos recitales históricos (Sol y Lluvia, por un lado, y Chico Trujillo, en medio de un legendario apagón), un libro y un documental (y un premio nacional del Minvu).

“La población se salvó, y ni siquiera hemos terminado el trabajo”, concluye Hernández, que sueña con convertir una fábrica abandonada en Departamental en sede de Mixart y con recuperar otros espacios del barrio como los minianfiteatros.

“Hace cinco años no había interés en nada y ahora hay una necesidad que raya en la urgencia en algunos vecinos para que se les haga algo. Pintamos una sede y se nos acercan de otra para preguntar por qué a ellos no. Te piden. Te exigen…”

Larga vida al Museo…

Museo a Cielo Abierto de San Miguel from Museo a Cielo Abierto on Vimeo.

Registros Pro Estudio de Audiencia Museo A Cielo Abierto en San Miguel – MACASM

Testimonios

Liceo Manuel de Salas (2016)

“Nosotros fuimos este año con el curso de  Sofía, la idea era visitarlo, conocer su historia y luego hacer un trabajo que involucrara tres asignaturas -lenguaje, arte e historia-, todo lo anterior pensando en darle espacio a la experimentalidad y transversalidad en los aprendizajes. ¡¡¡Hermoso lugar!!! Qué maravilloso proyecto de investigación, ojalá se saquen el Fondart. Suerte con eso.”

“Fernando, como apoderados de curso de la Sofi (7°D), después de la toma, los estudiantes de la media nos pidieron que nos involucráramos más en el proyecto educativo y en cambiar algunas metodologías muy rígidas de entregar la  enseñanza. A partir de ahí generamos como curso un proyecto, de esta manera queríamos aportar y tratar de cambiar ciertas prácticas. A esa parte del proyecto se sumaron dos séptimo más. Nosotros pensamos que fue un éxito.  Te comparto el link de con videos de la actividad:

Video 1: Publicado por Macarena Gómez el 4 de Diciembre del 2016. Audio: Punto Final – Gepe.

Elije Cultura “Museo a Cielo Abierto en San Miguel”

El proyecto muralista, llamado Museo a Cielo Abierto en San Miguel, nace en el mes de marzo del 2009. Este Museo se ha convertido en un expresión colectiva de arte callejero en Chile, donde comparten escenario y se entremezclan las técnicas del muralismo y graffiti con obras originales desarrolladas por los principales exponentes nacionales e internacionales, consagrados y emergentes, quienes aceptaron además que sus creaciones fueran previamente validadas por los vecinos residentes

  • Todo público
  • ¡ Gratis
  • Se puede visitar todos los días del año.
  • Elige Cultura
  • Colección permanente

  • Museo a Cielo Abierto en San Miguel San Miguel,  Región Metropolitana de Santiago.

 

Crédito: eligecultura.gob.cl

Con gran participación se inauguró en San Miguel la Escuela de Gestión Cultural Comunitaria

Con la visita al Museo a Cielo Abierto en San Miguel, se inauguró el pasado sábado 15 de enero la Escuela de Gestión Cultural Comunitaria de la Región Metropolitana.

En la oportunidad, los participantes pudieron conocer el proceso de gestación y desarrollo del Museo, conformado en la actualidad por más de 60 murales, de 85 mts2 cada uno, reuniendo en total más de 6.000 mts2 de arte urbano en la Población San Miguel.

Tras el recorrido, encabezado por Roberto Hernández, presidente del Centro Cultural Mixart, impulsor de la iniciativa, la multicancha de la la Junta de vecinos Villa San Miguel abrió sus puertas para recibir a los participantes. Allí los esperaba un refrigerio y la entrega de los primeros materiales de apoyo al proceso formativo.

La actividad contó con la participación de la Alcaldesa de la comuna Erika Martínez, la coordinadora del área de Ciudadanía y Cultura de la Seremi de las culturas Región Metropolitana, Camila Garrido, dirigentes de la Junta de Vecinos y los participantes de la Escuela venidos de una veintena de municipios de la región.

 

Dando la bienvenida a la comuna, la alcaldesa manifestó la importancia de relevar la cultura comunitaria y el trabajo que día a día realizan las organizaciones culturales de base en sus territorios, señalando que su rol es indispensable en el proceso de cambios que vive el país.

Para la coordinadora del área de Ciudadanía cultural del Ministerio de las culturas, Camila Garrido, esta instancia invita al reencuentro “y que mejor que sea intercambiando conocimiento y saberes. Las organizaciones siempre nos han demandado formalizar su aprendizaje y acceder a otras experiencias, por lo tanto, esta Escuela de Gestión Cultural certificada por la Universidad Guadalajara cumple ese anhelo, agradezco el trabajo de la Mesa y a todos los agentes que participaron de esta gestión”.

A nombre de la Mesa de Organizaciones Culturales Comunitarias, Marisol Urrutia señaló que “estamos muy contentos de dar inicio a esta Escuela, proyecto asociativo año 2021 que les entregara herramientas teóricas junto con compartir experiencias exitosas del trabajo cultural desde el territorio y para la comunidad”.

Por su parte Roberto Guerra, coordinador de la iniciativa por Egac, destacó la pertinencia de la Escuela al responder a los intereses y necesidades expresadas por las organizaciones, señalando que se trata “de un proceso largo y a la vez, muy esperado por el sector, que contribuirá a su fortalecimiento y a la visibilización de su labor”.

 

De este modo, durante los meses de enero y marzo, en sesiones en línea y actividades en terreno, la Escuela abordará los temas de gestión cultural, gestión cultural comunitaria, diseño de proyectos y registro y sistematización de experiencias, completando un total de 60 horas cronológicas, proceso certificado por Egac y la Universidad de Guadalajara.

Al finalizar la actividad, el destacado charanguista nacional Freddy Torrealba se hizo presente con un saludo musical, destacando que iniciativas como la escuela, son un estímulo a la participación de la comunidad.

Fotografías: Joliette Otárola, Nibaldo Flores y Roberto Guerra.

Crédito:egac.cl

 

 

Museo a cielo abierto en San Miguel

El interés de los residentes y la necesidad de detener y eliminar el deterioro de los edificios de la población San Miguel, producido por rayados y afiches, fueron el motor de esta iniciativa ciudadana que el Centro Cultural Mixart hizo suya, transformando el vecindario en un verdadera galería de Arte Público de acceso gratuito, sin restricciones de días y horarios para el disfrute de la comunidad, transeúntes y visitantes del lugar.

Hoy el proyecto Museo a Cielo Abierto en San Miguel se ha convertido en la mayor expresión colectiva de arte callejero en Chile, donde comparten escenario y se entremezclan las técnicas del muralismo y graffiti con obras originales desarrolladas por los principales exponentes nacionales e internacionales, consagrados y emergentes, quienes aceptaron además que sus creaciones fueran previamente validadas por los vecinos residentes de cada muro lo que le agrega un plus de participación único y que además permite generar un sentido de pertenencia con el mural y su entorno.

El Centro Cultural Mixart es un grupo de soñadores

El Centro Cultural Mixart es, un grupo de soñadores bien organizados y llenos de entusiasmo que vivimos, gozamos y sufrimos en la población San Miguel, comuna del mismo nombre, de Santiago de Chile.

Nos agrupamos en Mayo del año 2009, principalmente en base a nuestros vínculos familiares y de amistad, por compartir además intereses y frustraciones comunes y que cansados de culpar a los demás, decidimos intentar cambiar el futuro de nuestro barrio que tenía un muy mal pronóstico.

Somos personas comunes, con distintos oficios y actividades, asociados como Centro Cultural sin fines de lucro dado que como Familia y Amigos estamos comprometidos al 100% en mejorar la calidad de vida de nuestro barrio mediante la realización de actividades socio/culturales.

VISIÓN

El Centro Cultural Mixart tiene como visión convertirse en el principal articulador local de un proceso de mejoramiento continuo y sistemático, capaz de transformar a la población San Miguel, de un humilde barrio de viviendas sociales de los años ’60 donde viven cerca de 6.000 personas, en un verdadero ícono de reactivación turístico/cultural y social que sirva de ejemplo y esperanza para otras comunidades interesadas en doblarle la mano al destino, elevando la calidad de vida de sus habitantes y generando además un nuevo y sólido sentido de pertenencia.

Entendemos a nuestro barrio como una maravillosa y desafiante oportunidad donde factores tales como; una historia común; ubicación; nivel socio-económico; densidad; y una alta concentración de adultos mayores y niños; lo convierten en un verdadero laboratorio de ingeniería social donde podrán ser aplicadas todas las estrategias y herramientas disponibles en la actualidad para llevarlo a cabo y al cuál están todos invitados a participar.

MISIÓN

Generar alianzas con el Gobierno Central, la I. Municipalidad de San Miguel, con las organizaciones comunitarias locales y con cualquier otra organización ya sea pública o privada interesada en el financiamiento, desarrollo y asesoría en proyectos culturales de diversos tipos destinados a realizar una profunda transformación del espacio público.

Dado que Cultura se asocia inevitablemente con los social e infraestructura, se buscará además que estas alianzas nos permitan y apoyen en atender todos aquellos proyectos que significan y se traduzcan en el mejoramiento físico de nuestro entorno, plazas, calles, pasajes, platabandas, iluminación, aseo y áreas verdes, etc., todo lo cual potenciará y le dará sustentabilidad al desarrollo cultural del barrio.